05 noviembre 2007

Oración

Señor: que yo nunca rece para ser preservado de los peligros,
sino para alzarme ante ellos y mirarlos cara a cara.
Que no pida la extinción de mi dolor,
sino el coraje que me falta para sobreponerme a él.
Que no confíe en aliados en la guerra de la vida
sobre el campo de batalla del alma:
que sólo espere de mí.
Que no implore, espantado mi salvación,
que tenga la fe necesaria para conquistarla.
Dame no ser ingrato:
pues a tu misericordia debo mis triunfos.
Y si sucumbo, acude a mí con tu brazo fuerte.
¡Y dame la paz, y dame la guerra!

Rabindranath Tagore


5 comentarios:

aranzazu dijo...

¡Qué grande, Dios! ¡Cuánta sabiduría! Gracias por hacernos llegar sus palabras...

Anónimo dijo...

Cuando Dios toma un corazón lo vacía de todo lo que no es ÉL....

Anónimo dijo...

olvido de lo creado
memoria del creador
atención a lo interior
y estarse amando al amado....

Anónimo dijo...

¡Padre!

Entre Tú y yo, Señor.
Que dulce es poder decirte:Padre!
¡Que palabra más total!
para aquel que ayuda necesita;
para el que consuelo pide; para el que reclama valor ante la vida;
para aquel que pide Amor con gritos silenciosos.
Todo lo tienes Tú, Señor,
y todo nos lo das, sin restricciones.
Sólo hay que llamarte suavemente,
sin ritos ni ceremonias,
simplemente haciendo uso de un derecho,
el santo derecho de decirte ¡Padre!
y ahí estás Tú, solícito y atento.
Somos tus niños y es Tu regazo
nuestro hogar seguro, nuestro albergue tibio,
lleno de cordial felicidad,
donde con infantil confianza
aún osamos pedirte, muy bajito
¡apriétame duro contra Ti, Dios!
¡Padre - Madre mío! Sí.... ! Mío!

Anónimo dijo...

Dios es la eterna y soberana verdad, sabiduría, amor increado y el alma del hombre es una criatura de Dios que tiene las mismas propiedades aunque creadas y ella tiende constantemente a aquello para lo cual fue creada:AMAR A DIOS....