14 agosto 2008

Hacerse las preguntas adecuadas


Todos buscamos en algún momento de nuestra vida respuestas a algo, y una buena forma de obtenerlas es hacernos preguntas. Pero hace falta que las preguntas sean las adecuadas para que al formularlas muevan en nuestro interior algo que haga posible que surja la respuesta. Es como tratar de hacer fuego frotando dos piedras, de pronto puede surgir la chispa perfecta que pudiera encenderlo.

Es necesario, además, estar ahí presente, atreverse a sentir, no huir ante lo que surja, dar tiempo, cosas que no siempre estamos dispuestos a hacer porque eso compromete y el ser humano, en su mayoría, no se quiere comprometer más que en lo que le apetece y cuando le viene bien. “Sí, yo quería hacer fuego, pero ahora que he generado una buena chispa y veo que es posible dudo, no sé si de verdad quiero, mira que si… Es el momento de arrimar combustible, cobijarlo, soplar un poquito para que la llama se prenda, y en todo ese proceso ya se intuye lo que viene.

No dedicamos a nuestras necesidades internas el tiempo que hace falta, muchos ni siquiera sienten que les haga falta inmersos como están en las actividades externas mientras, eso sí, dedican horas y horas a esculpir cuerpos perfectos y magníficos para sus espíritus hambrientos o a conseguir logros materiales que nunca saciaran otro tipo de hambre.

Cada vez que surge una pregunta desde dentro, de verdad, es una llamada de nuestro ser para que a través de ella lleguemos a algo. Aceptar el reto de la vida como seres humanos, seres que sienten inquietud, curiosidad, ganas de aprender y de hacer cosas, cosas distintas y no siempre lo mismo y de la misma forma, es aceptar la posibilidad de ir más allá del punto actual, es ampliar nuestras fronteras naturales, es estar dispuesto a replantearse todo lo que uno cree y aceptar la llegada de lo nuevo, de una nueva luz que ilumine otro trecho de nuestro camino, de implementar algún cambio o de empezar de nuevo. En suma, de descubrirse y conocerse un poco más.

Ante las preguntas no valen las reservas, pues la reserva que tengamos será lo que nos faltará en la respuesta que hallemos. Es entregarse totalmente y confiar en la vida, pues al fin y al cabo es la misma vida quien al vivirnos y darse en nosotros nos da también las preguntas que nos permitirán seguir hacia delante, siempre hacia delante.

¿Quién no tiene alguna buena pregunta que hacerse? Aprovechemos el tiempo ahora, no posterguemos, la respuesta puede ser tan importante…

13 comentarios:

Jayja para tí... dijo...

Pudiera sentir miedo, querer retroceder, pero si el fuego surgio tan difícil de prender en épocas remotas, me imagino que hay que dejarlo crecer, porque todo estaba en su justo momento para que la llama se prendiera, aún aunque sea la del corazón... y si prendió ha de ser que la hoguera no quería morir y el vigilante se durmió... tal vez llegó el viento y la avivó...

Anónimo dijo...

la pregunta adecuada...me recuerda a mi fe de erratas del que escribi en mi blog....algo de las preguntas adecuadas tb escribi...y la verdad que muchas veces me hice la sorda cuando "las llamas desde adentro a mi ser" gritaban que querian respuestas.....quizas no estaba preparada para responderlas...seria cuestion de encontrar la chispa adecuada...para encender el motor y comenzar a trabajar sobre eso....
trataremos...trataremos...esperemos no seguir haciendonos los sordos!
besines querido y que tengais un buen fin de semana!
:o

Nora dijo...

Animemos a las preguntas Adonai!
Un abrazo!!
Pasión

Miriam Jaramillo dijo...

De visita en este blog. Sera siempre un placer hacerlo. Con amor e infinito respeto.

M@R dijo...

AHHH,,,
MI PREGUNTA SE PUEDE AMAR SIN SENTIR NADA, SIN AMOR???
SE PUEDE ESTAR VIVO ESTANDO MUERTO,,,
Y ASI HAY UN MILLON MAS,,,
NO TENDRE TIEMPO PARA TODAS LAS REPUESTAS,,,
QUE COMPLICADA Y SENCILLA ES LA VIDA,,,

ABRAZOS,,,

Jayja para tí... dijo...

Ayuda-hispana-enUSA

Este blog esta creado con objetivos de ayuda, toda persona que desee aportar información será bienvenida, la información debe ser en todo momento investigada y comprobada por todo aquel que decida seguir los consejos del blog. Debe quedar claro que son consejos no legales y de objetivo humanitario. Cada persona que haga un comentario, estará siendo responsable del mismo. Agradecemos que todos querrámos y luchemos por un Mundo mejor.

misticaluz dijo...

Me ha gustado mucho esta entrada, pues lleva a la reflexión. Además escribes con mucha sabiduría (por lo menos así lo veo yo)o conocimiento interior, de lo cual aprendemos.

recibe un abrazo lleno de buenas vibraciones!

Yudith Valles de Perez dijo...

Hola Adonai, preguntas que necesitamos respuestas siempre que nos agraden, que no nos lastimen...algo asi como autoengaño...somos debiles...
Pasa por mi blog te deje algo. Besos

Perséfone dijo...

Que buena entrada.

Y es que ademásde las preguntas que podamos hacernos a no, todos tu textos son una invitación a la más sincera de las reflexiones.

Sigue deleitandonos así.

Un abrazo.

Mónica dijo...

hola adonai, tanto tiempo!! Es verdad de que es bueno hacerse preguntas, pero deben ser las exactas como bien dices.

Justo en el post mio de hoy y gracias a una canción que escuché de casualidad me hizo hacerme la pregunta correcta en el momento correcto.

Bsss.

Cristi dijo...

Creeme que el tiempo que ya tengo aqui desde que se fue mi esposo de regreso a casa, he estado haciendo muchas preguntas, y de ves en cuando es bueno tener un reencuentro con uno mismo y dejar el corazon en paz y llenarse de todas las respuestas que se necesiten...un besote.....

Jayja para tí... dijo...

Cultivo una rosa blanca... para tu dolor...amigo español...
Hoy, un poco más que antes, lo que es de España
me concierne, allí he hecho amigos
que aprecio con el corazón...
Para mis amigos españoles del Blog
Adonai
Alma
Amis95-mi abuela
Angeles
Quenxe
Tena

siento mucho la tristeza de su tierra
un abrazo cálido
humilde

Jayja

Unknown dijo...

tienes razón Adonai! para darnos respuestas sinceras debemos ser muy sinceros con nosotros mismos, porque sino todo queda a medias. Yo una vez tuve que hacerme una gran pregunta, y sin escucharme siempre me daba multitud de respuestas, confusas, equivocadas, liosas. Hasta que me paré me escuché y surgió de mi la respuesta, la única, la que realmente no quería escuchar. Ahora vivo sabiendo esa respuesta y cada nueva decisión que debo tomar se sustenta de aquello que aprendí al responderme con sinceridad. Un abrazo Adonai!